Exposición, conferencia y documental en homenaje a las presas del Franquismo en la Prisión Central de Mujeres de Segovia 65 años después de la huelga de hambre de 1949
- INAUGURACIÓN:
Sala Ex.Presa 1 viernes 14 de febrero a las 19:00.
Contenido de la inauguración:
* Conferencia:
"Lucha tras las rejas franquistas. La Prisión Central de Mujeres de Segovia",
a cargo de Juan Carlos García Funes.
a cargo de Juan Carlos García Funes.
En ella se repasarán algunos aspectos generales de la antigua cárcel, la represión contra las mujeres, el sistema penitenciario franquista y se hará hincapié en la huelga de hambre de 1949
* Documental:
"Del olvido a la memoria: Presas de Franco".
"Del olvido a la memoria: Presas de Franco".
Director: Jorge Montes Salguero, 2007
Sinopsis: Este emotivo documental describe la
miseria, la injusticia y el sufrimiento que vivieron en sus carnes
numerosas españolas durante el Franquismo. Gracias a los testimonios
inéditos de diez mujeres republicanas se hace un recorrido por los años
de calvario que pasaron en las cárceles franquistas.
Se basa en el trabajo de Tomasa Cuevas, ex militante del Partido
Comunista, que recogió en su vieja grabadora los desgarradores
testimonios de otras mujeres, que al igual que ella, fueron encarceladas
injustamente. Tomasa tenía un solo objetivo: que esa experiencia no se
perdiera en el olvido.
En él se recogen los recuerdos en prisión de la propia Tomasa
Cuevas, Trinidad Gallego, María Salvo, Concha Carretero, Nieves Torres,
Soledad Díaz, Angustias Martínez, Julia Manzanal, Carmen Rodríguez y
María Cuesta. En el documental participa también la escritora
Teresa Pàmies quien, en el exilio, ayudó a Tomasa Cuevas a recopilar y
editar, en la trilogía “Testimonio de mujeres en las cárceles
franquistas” las experiencias de mujeres que sufrieron la represión
franquista
- EXPOSICIÓN:
"Segovianas/os presas/os del Franquismo":
Sala Ex.Presa 2:del viernes 14 de febrero hasta el 23 de febrero
HORARIOS exposición:
martes a viernes de 18:00 a 21:00
sábado de 12:00 a 14:00 y de 18:00 a 21:00
domingo de 12:00 a 14:0
lunes: descanso
Cartel realizado por Celia Arias
En los próximos días, el Foro por la Memoria de Segovia queremos ampliar el conocimiento de la ciudadanía segoviana sobre la huelga de hambre de 1949, uno de los acontecimientos más relevantes de la memoria democrática que tuvo lugar en Segovia.
En los próximos días, el Foro por la Memoria de Segovia queremos ampliar el conocimiento de la ciudadanía segoviana sobre la huelga de hambre de 1949, uno de los acontecimientos más relevantes de la memoria democrática que tuvo lugar en Segovia.
Para ello, del viernes 14 al domingo 23 de febrero podrá visitarse en
la Sala Ex.Presa 2 la exposición "Segovianas/os presas/os del
Franquismo".
El propio viernes 14 se inaugurará la exposición con una
conferencia en la Sala Ex.Presa 1 bajo el título "Lucha tras las rejas
franquistas: la Prisión Central de Mujeres de Segovia", y la proyección
del documental "Del olvido a la memoria: Presas de Franco".
El Foro por la Memoria de Segovia queremos recordar y reivindicar el
papel de la mujer en la lucha y la resistencia contra la dictadura
franquista aun en las condiciones más deplorables y penosas de sus
cárceles. Hace 65 años las presas de la Prisión Central de Mujeres se
declararon en huelga de hambre, exigiendo a las autoridades de la
prisión la extensión a todas ellas de un castigo que habían impuesto
sólo a una de ellas. Dicho castigo fue fruto de denunciar sus
condiciones de vida en la prisión a una abogada chilena que había venido
a Segovia, junto con diversas autoridades franquistas y la dirección de
la prisión, a realizar un estudios sobre diversos sistemas
penitenciarios de la Europa del momento. Las mujeres antifascistas
dieron un ejemplo de dignidad y resistencia con una acción tan peligrosa
para su propia salud, ya dañada de por sí por los malos tratos, las
torturas, la falta de higiene, la alimentación escasísima y las
condiciones del penal.
La que hoy se conoce coloquialmente como la "antigua Cárcel, era un edificio de tipo panóptico inaugurado en 1924 como Reformatorio de Mujeres, posteriormente sería Hospital Asilo Penitenciario para ancianos y enfermos de tuberculosis. Tras el golpe de Estado del 18 de julio de 1936, se vio abarrotado de presos políticos, que ya no abandonarían el edificio durante toda la dictadura. En 1946 se transformó en Prisión Central de Mujeres y, durante sus diez años de existencia, albergó al mayor contingente de luchadoras antifranquistas, que convirtieron esta prisión en un centro de formación política y cultural clandestino. El papel que representó la cárcel de Burgos para los presos políticos lo constituyó Segovia para las políticas. Su impulso organizativo desarrolló y mantuvo redes de solidaridad que llevaron a declarar una huelga de hambre en enero de 1949. Aunque fueron castigadas severamente, con este pulso ante las autoridades represivas, las presas defendieron su dignidad y su identidad como reclusas políticas. Desde finales de los sesenta, el edificio encerró de nuevo a militantes antifranquistas de organizaciones políticas y sindicales.
La que hoy se conoce coloquialmente como la "antigua Cárcel, era un edificio de tipo panóptico inaugurado en 1924 como Reformatorio de Mujeres, posteriormente sería Hospital Asilo Penitenciario para ancianos y enfermos de tuberculosis. Tras el golpe de Estado del 18 de julio de 1936, se vio abarrotado de presos políticos, que ya no abandonarían el edificio durante toda la dictadura. En 1946 se transformó en Prisión Central de Mujeres y, durante sus diez años de existencia, albergó al mayor contingente de luchadoras antifranquistas, que convirtieron esta prisión en un centro de formación política y cultural clandestino. El papel que representó la cárcel de Burgos para los presos políticos lo constituyó Segovia para las políticas. Su impulso organizativo desarrolló y mantuvo redes de solidaridad que llevaron a declarar una huelga de hambre en enero de 1949. Aunque fueron castigadas severamente, con este pulso ante las autoridades represivas, las presas defendieron su dignidad y su identidad como reclusas políticas. Desde finales de los sesenta, el edificio encerró de nuevo a militantes antifranquistas de organizaciones políticas y sindicales.
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